Arqueología y Territorio Medieval 29, 2022. e6576. I.S.S.N.: 1134-3184 DOI: 10.17561/aytm.v29.6576

Vida cotidiana, Sociedad y Control Territorial en el Entorno Circumpirenaico Occidental: el Castillo Medieval de Irulegi (Valle de Aranguren, Navarra)1

Daily Life, Society and Territorial Control in the Western Circumpyrenean Surrounding: the Medieval Castle of Irulegi (Valle de Aranguren, Navarra)

Mattin Aiestaran2, Javier Buces3, Daniel Ruiz-González4, Erik Arévalo-Muñoz5, Olaia Granizo6, Lorena Elorza7, Pedro Castaños8, Jone Castaños9, Mikel Legorburu10, Josu Narbarte11, Jesús Sesma12, Jesús García13, José Antonio Mujika-Alustiza14, Patxi Pérez-Ramallo15, Eneko Iriarte16 y Juantxo Agirre-Mauleon17

Recibido: 3/09/2021
Aprobado: 27/1/2022
Publicado: 8/03/2022

RESUMEN

El castillo de Irulegi, localizado en la cima del monte Irulegi o Peña de Lakidain (Valle de Aranguren), es uno de los ejemplos más destacados del Reino de Navarra.

El castillo se erigió con finalidades defensivas y de control del territorio circundante. Su inicio se encuentra entre el siglo XI y principios del XII, y muestra una ocupación ininterrumpida hasta finales del siglo XV.

Los materiales que se presentan en este trabajo constituyen elementos propios de la vida cotidiana referentes a la alimentación, actividades agropecuarias, actividades artesanales y bélicas, o el empleo del tiempo de ocio, y que atestiguan, además, las evidencias materiales de otras actividades como las religiosas y de ostentación.

Este trabajo presenta una visión de conjunto a fin de definir los principales rasgos de los restos de elementos muebles de este asentamiento fortificado y su trascendencia para el estudio de la vida cotidiana y la sociedad medieval desde la realidad de la materialidad de una fortaleza.

Palabras clave: arqueología, cultura material, castillo, Edad Media, Reino de Navarra.

ABSTRACT

The Irulegi castle, located at the top of Mountain Irulegi or Peña de Lakidain (Aranguren, Valley), is one of the most outstanding examples of medieval castles within the Kingdom of Navarre.

The castle was built for defensive purposes and to control the surrounding territory between the 11th and early 12th centuries, adn it was occupied unineterruptedly until the end of the 15th century.

The materials presented in this article constitute a varied repertoire that includes typical elements of daily life related to food, farmig, crafts, warfare, and the use of leisure time, as well as material evidence of other activities such as religious activities and ostentation.

This paper presents an overview of all of them to define the main features of the remains of the movable elements of this fortified settlement and their significance for the study of everyday life and medieval society from the reality of the materiality of a fortress.

Keywords: Archaeology, material culture, castle, Midle Age, Kingdom of Navarre.

1. INTRODUCCIÓN

El castillo medieval de Irulegi es uno de los ejemplos más destacados del Reino de Navarra, localizado en la cima de Irulegi o Peña de Lakidain, Valle de Aranguren (Fig. 1). Geográficamente se sitúa en los valles prepirenaicos, entre los Pirineos y el río Ebro, a las puertas orientales de Iruñerria o Cuenca de Pamplona.

Fig. 1. Ubicación del yacimiento de Irulegi / Location of the Irulegi site.

Es uno de los pocos casos de la geografía navarra que cuenta con depósitos estratigráficos cotejados con dataciones absolutas y ha sido excavado casi en su integridad (Fig. 2). Gracias a los estudios de la abundante documentación histórica desde el siglo XIII referente a la fortaleza (MARTINENA, 1994, 2017) Irulegi constituye un buen ejemplo para comparar y complementar los distintos registros escritos, arquitectónicos y materiales.

Fig. 2. Dataciones radiocarbónicas del yacimiento de Irulegi / Radiocarbon datatings of Irulegi site (Modificado de / Modified from: AIESTARAN et al., 2020).

La fortificación se erigió con fines defensivos y de control del territorio circundante en el siglo XI y fue ocupada ininterrumpidamente hasta finales del siglo XV, como ya se ha señalado en trabajos anteriores (BUCES et al. 2013; AIESTARAN et al. 2020).

La fortaleza pudo ser construida por el poder regio, aunque al faltar testimonios escritos que lo verifiquen, tan solo se pueda sugerir. De todos modos, esta hipótesis se refuerza al tratarse de un castillo real.

La torre del homenaje pentagonal en proa es el origen del castillo, ya que a partir de esta torre aislada pasa a ser, hacia la mitad del siglo XIV, una especie de fortificación defendida por muros y torres en su periferia. Es en ese momento cuando la planta del castillo adquiere la distribución arquitectónica y arqueológica que se percibe en la actualidad. En su anatomía sigue una tipología similar a la denominada románica, mostrando una complejidad funcional y una planta regular de las que carecen los castillos roqueros circundantes (AIESTARAN et al., 2020).

En general la fortaleza se ha conservado de forma adecuada, gracias a las escasas alteraciones postdeposicionales y a la ausencia de superposición de estructuras modernas sobre las medievales.

El castillo ubicado en la cima del monte Irulegi presenta los siguientes espacios y elementos estructurales defensivos que, aunque fueron descritos en trabajos anteriores (BUCES et al., 2013; AIESTARAN et al., 2020), conviene mencionar18 (Fig. 3):

Fig. 3. Planimetría del castillo de Irulegi. Sociedad de Ciencias Aranzadi. / Planimetry of the castle of Irulegi (AIESTARAN et al., 2020).

Torre del homenaje pentagonal en proa: la torre del homenaje, o torre mayor (UE 1110), es el edificio más importante del castillo. Normalmente solía ser la torre más alta y la que se construía con mejores materiales. Habitualmente contaba con más de una planta de altura y servía de vivienda del señor o “tenente” (posteriormente alcaide), por lo cual también se solía denominar palacio. El de Irulegi es de planta poligonal en proa, presenta un aparejo de grandes sillares de piedra caliza dispuestos a soga en el que se alternan los tamaños en alturas sucesivas (aparejo pseudoisódomo).

Los primeros trabajos arqueológicos comenzaron retirando el nivel superficial y el posterior nivel de derrumbe (UE 1010). Este relleno que colmataba la superficie del interior de la torre estaba compuesto por escasa tierra, debido al abundante material pétreo relacionado con el derribo de los muros de la misma torre. Su excavación se dio por finalizada al alcanzar un relleno de arcilla compacta (UE 1011) en la que se intercalaban zonas de quemado, materiales constructivos (tejas), además de restos de fauna, metal y fragmentos de cerámica. Este estrato se extendía por todo el espacio interior de la torre. En el extremo sureste se hallaron restos de actividad antrópica contemporánea (UE 1016), posiblemente relacionada con algún tipo de actividad furtiva o similar. Las labores arqueológicas nos han permitido documentar una serie de estratos de origen antrópico diferenciados, relacionados tanto con una primera fase de acondicionamiento como con su posterior ocupación. Así, identificamos unidades estratigráficas (UE 1015) que cumplen la función de nivelación-preparación de un terreno de pronunciada pendiente en dirección sur y otros estratos (UE-s 1012, 1013, 1014) (Figs. 4 y 5).

Fig. 4. Matrix estratigráfica de la torre del homenaje. / Stratigraphic matrix of the keep.

Fig. 5. Perfil estratigráfico de la torre del homenaje. Sociedad de Ciencias Aranzadi. / Stratigraphic profile of the keep (AIESTARAN et al., 2020).

Muralla de cierre este, oeste y sur, con sus cinco torres circulares en los vértices y en el centro de la muralla sur; en total comprende aproximadamente 136 m de perímetro que cubren intramuros una superficie de 569 m2, incluidas la torre del homenaje y otras estructuras internas. Así pues, la muralla perimetral de Irulegi (UE 1140) se encuentra rodeando el conjunto del castillo y es la defensa principal de toda la estructura. Se asienta sobre la roca natural de la cima del monte (UE 1004), colocada encima de una preparación de cal y pequeños ripios (UE 2501). En cuanto a su cronología, hemos podido averiguar que se trata de una de las estructuras más antiguas del conjunto. Las torres fueron nombradas de la siguiente manera: UE 1160 a la torre del sureste, UE 1120 a la central del lado sur, UE 1170 a la del suroeste, UE 1180 a la del noroeste y UE 1150 a la del noreste. Todas estas torres menores debieron de contar con saeteras o arqueras a ambos lados (UUEE 1161, 1162, 1121, 1122, 1171, 1172 y 1181), excepto en la torre que se sitúa en el lado noreste (Figs. 6 y 7).

Fig. 6. Matrix estratigráfica de la muralla y las torres / Stratigraphic matrix of the wall and the towers.

Fig. 7. Fotografía de los resultados de las intervenciones arqueológicas / Photograph of the results of the archaeological interventions.

Falsabraga: esta estructura (UE 2110) se interpreta como una obra guarnecida destinada a retrasar, canalizar y obstaculizar el ataque enemigo. Consta de dos hiladas de sillarejo irregular colocado a hueso sobre la roca natural en dos lienzos que miden unos 27 metros aproximadamente. Se ubica en paralelo a la muralla de cierre este y sur, formando un pasillo de tres metros de anchura aproximadamente, el cual estaba todo cubierto por el derrumbe de los muros (UE 1001).

Estancias del norte: se ubican paralelas a la muralla norte y aprovechan dicha defensa para adosarse a ellas. De este a oeste, las estancias se dividen en tres recintos (1200, 1190 y 2550). Todas estas estructuras aparecen superpuestas al enlosado (UE 1101), proponiendo para ellas una cronología de principios del siglo XV.

Enlosado de la zona este y patio de armas: se halló por primera vez en la zona noreste, al comenzar a excavar las estancias del norte. El enlosado (UE 1101) contiene dos niveles de lajas de arenisca locales. Sobre él se hallaban las unidades superficiales (UE 1001) y de derrumbe (UE 1002), unidades que se encuentran en toda el área interior del castillo. Se erigió sobre un nivel de preparación y nivelación que contenía materiales medievales anteriores al siglo XV.

Aljibe: de planta casi cuadrangular, está excavado directamente en la roca natural del terreno parcialmente labrada. Se trata de una estructura que se encuentra delimitada en todo su perímetro exterior por el enlosado (UE 1101), el cual adquiere una ligera pendiente en dirección al aljibe con el fin de facilitar el llenado del mismo. De planta casi cuadrangular, el aljibe está excavado directamente en la roca natural del terreno, con unos 16 metros cuadrados de superficie (UE 1130) y sin aparente evidencia alguna de solera, cuya función cumpliría la propia roca natural parcialmente labrada.

En su excavación arqueológica se procedió a la eliminación del nivel de derribo (UE 1030) del interior del aljibe, formado principalmente por grandes sillares procedentes de la torre principal, así como de mampuestos de los muros perimetrales y fragmentos de teja. Una vez extraído el nivel de derribo, se intervino en un nivel inferior (UE 1031) de tierra humedecida con pequeños fragmentos de piedra, ladrillo, tejas y algún resto de madera carbonizada. Este hecho indica que el aljibe fue colmatado en un mismo momento con el derrumbe procedente de las estructuras del interior del castillo. Es de subrayar la ausencia de otros materiales arqueológicos en su interior.

Capilla norte: aprovechando la torre semicircular de la esquina noreste se encuentra la estancia interpretada como capilla del castillo de Irulegi, la cual abarca una superficie aproximada de 20 metros cuadrados y tiene una morfología cuadrangular que termina en un semicírculo. Muestra su altar y ábside orientados hacia el este.

Al oratorio o lugar de culto se accede desde el patio enlosado por el acceso (UE 1211) realizado para tal fin. Este acceso escalonado fue habilitado en el muro interno UE 1102, que comunica la capilla con el sector más oriental del recinto superior amurallado. Todo el espacio de la capilla se encontraba colmatado por las unidades superficiales (UE 1001) y de derrumbe (UE 1002).

Primera estancia del sur: es una estructura pétrea de planta rectangular con un apéndice que termina en forma circular por la torre menor. El proceso de excavación efectuado en este recinto de 14 m2 aporta la identificación de diferentes períodos constructivos y ocupacionales.

Tras el retirado del nivel superficial y del derrumbe de bloques procedentes de los muros (UE 1001 y 1002), la intervención arqueológica comienza con la excavación del relleno de arcilla UE 1020, similar al que encontrábamos en la torre principal (UE 1011), y que colmataba todo el espacio interno delimitado por los muros UE 1123 y UE 1124. El primero (UE 1123) delimita la estancia en su lado oeste y discurre perpendicular a la muralla de cierre sur. Contiene además, una apertura a modo de acceso (UE 1125) a la segunda estancia, de unas dimensiones de 80 x 90 cm. El segundo murete (UE 1124) se ubica en el límite norte de la estancia y lo separa del patio de armas.

En cuanto a las unidades deposicionales, la solera de argamasa (UE 1021) y el relleno (UE 1022) corresponderían a un último periodo de remodelación de este espacio, coetáneo al murete UE 1123. Bajo esta solera y su relleno, y tan solo en la zona pegante a la cabecera de la torre, encontramos una serie de unidades estratigráficas (UE 1023, UE 1024 y UE 1025) que podrían estar relacionadas con lo que en inicios se pensó que podía ser un período de derribo-incendio de la cubierta, anterior a la fase constructiva de la solera. Sin embargo, las actuaciones en la estancia adyacente han mostrado que estas unidades deposicionales, que muestran signos de termoalteración, responden a las actividades de un horno que se ubicaba entre las dos estancias, que discurría por debajo (y siendo por ello anterior) a la solera de argamasa UE 1021 y su relleno UE 1022 y el murete UE 1123. En cotas inferiores a los estratos UE 1024 y UE1025 se localiza el relleno UE 1026 sobre el que se apoya directamente la solera de piedra (UE 1129) de la torre circular UE 1120. Por último la fase constructiva más antigua documentada hasta el momento correspondería a la solera de argamasa UE 1029, que corta al relleno de nivelación del terreno UE 1028 en la zona pegante a la cabecera de la estancia.

Segunda estancia del sur: es de una superficie actualmente desconocida, ya que solamente se excavaron 8 m2 sin encontrar su final hacia el lado oeste. En esta estancia se hallaron prácticamente las mismas unidades estratigráficas del primer recinto, encontrando niveles rubefactados muy similares a los del primer ámbito. Dichas unidades correspondían a un momento anterior al siglo XV, en el que las dos estancias no se encontraban separadas, y adosado al muro principal se hallaba un horno (UE 4016) de morfología circular que fue excavado parcialmente. Este horno parece ser una de las estructuras internas más antiguas del castillo, datado en el siglo XII (Fig. 8).

Fig. 8. Perfiles estratigráficos de las estancias del sur. De izquierda a derecha: perfil de la primera estancia del sur y perfil de la segunda estancia del sur. Sociedad de Ciencias Aranzadi. / Stratigraphic profiles of the southern rooms. From left to right: Profile of the first southern room and profile of the second southern room (AIESTARAN et al., 2020).

Entrada del noroeste: se ha localizado una estancia enlosada (UE 1101) y bastante bien conservada de aproximadamente 9,6 m2, cuya función probablemente fuera la de vestíbulo o estancia tras el acceso principal.

Estancias del noroeste: entre la muralla perimetral oeste y el vestíbulo que da a la entrada, se encuentra una estancia que comunica con la torre circular noroeste (UE 1180) mediante el escalón dispuesto para ello (UE 4052). Este ámbito fue parcialmente excavado, ya que solamente se retiraron los niveles superficiales (UE 1001) y niveles de derrumbe (UE 1002). Se desconoce la superficie que llegó a abarcar hacia el lado sur, ya que no se llegó a encontrar límite alguno. De todos modos, la extensión conocida de este espacio es de aproximadamente 11 m2.

Tan solo el castillo de Ablitas (Bienes y Sola, 2015), Santacara (Del Olmo, 2014) e Irulegi tienen todos los elementos propios de los castillos denominados románicos, como murallas, torre del homenaje, torres menores, aljibe, estancias anexas, capilla y patio de armas.

Como ya se viene señalando en publicaciones recientes (RAMOS, 2000, 2012; AIESTARAN et al., 2020), en relación a las fortificaciones plenomedievales del Reino de Navarra, no parecen existir tipologías arquitectónicas concretas. El panorama es diverso y cada caso parece atender a sus propias circunstancias coyunturales: ubicación geográfica general, función principal, ubicación concreta, contexto cronológico, etc. Solamente en algunos casos se puede intuir una voluntad de seguir un diseño concreto, como en el caso de la torre pentagonal en proa, que no es para nada un fenómeno generalizado.

Todo ello en lo que respecta al tema de la arquitectura referente a los castillos del Reino de Navarra, pero en lo referente a los materiales arqueológicos recuperados en las excavaciones de dichas fortalezas, el asunto en particular no ha sido tan atendido.

Y es que la investigación de los materiales arqueológicos concernientes a los castillos del Reino de Navarra es dispar e incompleta, y sigue pendiente una caracterización de la cultura material que permita ahondar en aspectos económicos, sociales, políticos, o establecer análisis comparativos con los territorios circundantes (QUIRÓS y TEJADO, 2012). Con este estudio se pretende contribuir a mejorar dicho conocimiento.

Además, los avances recientes en arqueología medieval permiten una aproximación desde una perspectiva renovada (ÁLVARO y TRAVÉ, 2019), dando pie a abordar el estudio del conjunto de materiales del castillo de Irulegi con un afán multidisciplinar.

De este modo se plantea el objetivo de la correcta caracterización del conjunto de los materiales del castillo con el fin de dar respuesta a las cuestiones inherentes a su cronología y las actividades acaecidas en él, que ya se han comenzado a responder desde los registros arquitectónicos y documentales.

2. METODOLOGÍA

El presente artículo contempla una cuantificación y caracterización de los restos recuperados atendiendo a la materia prima (cerámica, metal, etc.) para profundizar en estos espacios de poder y en la configuración del territorio navarro medieval.

El primer paso ha consistido en su catalogación con bases de datos específicas para cada tipo de material y documentación gráfica de los elementos más significativos y mejor conservados. Posteriormente se ha realizado un análisis macroscópico de visu y se ha comparado con materiales similares de otros yacimientos aledaños, siguiendo la metodología propia de cada tipo de registro.

Sin embargo, cada registro material ha tenido su metodología propia.

En cuanto a la cerámica, se han seguido una serie de indicadores y criterios estandarizados, que permiten el estudio sistemático de los restos arqueológicos (ARCELIN y TUFREAU-LIBRE, 1988). Estos criterios incluyen la clase de producción, factura, pasta, cocción, tipología y cronología probable, y se han establecido para cada fragmento de manera individualizada.

Para realizar la base de datos de los elementos metálicos se han consultado varios ejemplos, en donde los elementos metálicos se clasifican primero por el material y luego por la función.

La metodología empleada en el estudio arqueozoológico, ha sido la identificación a nivel anatómico y taxonómico, así como los criterios para la estimación de la edad y del sexo, común en este tipo de trabajos (BINFORD, 1981). Además del número de restos de cada parte del esqueleto se ha analizado el número mínimo de elementos (NME) (STINER, 1991) y el número mínimo de unidades anatómicas (MAU) (BINFORD, 1981). Todas las medidas se han obtenido siguiendo la metodología ya clásica de V.D. Driesch (1976), utilizada en la mayoría de análisis de faunas ibéricas. Se ha utilizado asimismo la colección de referencia de la Sociedad de Ciencias Aranzadi.

3. EL REGISTRO MATERIAL DE IRULEGI

Los materiales arqueológicos recuperados en la excavación de Irulegi en distintas unidades estratigráficas (Tabla I) (campañas 2008-2012 y 2016-2017) se resumen en 1.434 fragmentos cerámicos, 702 metálicos, 2.617 faunísticos, 14 elementos de industria ósea y 17 monedas.

Tabla I. materiales arqueológicos según la UE, ubicación espacial general, el tipo de material y los porcentajes. / Archaeological materials according to the UE, spatial location, type of material and percentages.

MATERIALES ARQUEOLÓGICOS DEL CASTILLO DE IRULEGI

UE

ESPACIO

METAL

CERÁMICA

R. ÓSEO

MONEDA

TOTAL

%

SIN UE

Sin ubicación

7

0

356

0

363

7,6

1001

Castillo general (derrumbe)

97

125

371

2

595

12,4

1002

Castillo general (derrumbe)

78

705

864

5

1652

34,6

1003

Castillo general

0

12

4

0

16

0,3

1010

Torre del homenaje

5

2

2

0

9

0,1

1011

Torre del homenaje

191

52

123

4

370

7,7

1020

Primera estancia del sur

90

308

342

3

743

15,5

1022

Primera estancia del sur

22

71

264

1

358

7,5

1101

Enlosado zona este

5

0

0

0

5

0,1

1013

Torre del homenaje

114

65

1

0

180

3,7

1014

Torre del homenaje

51

20

1

1

73

1,5

1015

Torre del homenaje

1

0

0

0

1

0,02

1016

Torre del homenaje

28

3

0

0

31

0,6

1025

Primera estancia del sur

2

1

11

0

14

0,3

1026

Primera estancia del sur

3

8

8

0

19

0,3

4035

Segunda estancia del sur

5

4

11

0

20

0,4

4036

Segunda estancia del sur

0

0

136

0

136

2,8

4001

Segunda estancia del sur

0

3

8

0

11

0,2

4002

Segunda estancia del sur

0

26

60

0

86

1,8

4009

Segunda estancia del sur

0

0

10

1

11

0,2

4010

Segunda estancia del sur

0

0

4

0

4

0,08

4011

Segunda estancia del sur

0

0

4

0

4

0,08

4015

Segunda estancia del sur

0

0

2

0

2

0,04

4022

Segunda estancia del sur

0

2

5

0

7

0,1

4028

Segunda estancia del sur

0

1

0

0

1

0,02

4023

Segunda estancia del sur

1

0

0

0

1

0,02

2500

Muralla norte

2

10

15

0

27

0,5

2503

Muralla norte

0

16

10

0

26

0,5

TOTAL

 

702

1.434

2.612

17

4.765

100

A continuación se describirán más detalladamente los materiales arqueológicos por el tipo de material.

3.1. Cerámicas

La principal producción es la cerámica sin revestir, con un 53% (762 fragmentos pertenecientes a 630 ejemplares), seguida por la cerámica vidriada (656 fragmentos de 458 ejemplares) que alcanza un 45%. La presencia de cerámicas engobadas (13 fragmentos, 0,91% del total) y esmaltadas (3 fragmentos de 2 ejemplares, un 0,21% del total) resulta prácticamente anecdótica (Figs. 9 y 10).

Fig. 9. Cuantificación de las clases de producción / Quantification of production clases.

Fig. 10. Imágenes de las cerámicas más representativas: 1. Fragmento de cerámica vidriada con decoración estampillada, 2. Fragmento con decoración pintada y vidriado, 3. Jarrita incompleta con decoración pintada en negro, 4. Perfil completo de cuenco vidriado, 5. Fragmento de olla sin revestir, 6. Fragmento de olla vidriada. / Images of the most representative ceramics: 1. Glazed ceramic fragment with stamped decoration, 2. Fragment with painted and glazed decoration, 3. Incomplete jug with black painted decoration, 4. Glazed bowl, 5. Uncovered pot fragment, 6. fragment of glazed pot.

Se puede realizar una distinción en cuanto al tratamiento de las mismas a nivel macroscópico. En cuanto a los métodos de elaboración, se han detectado tres formas diferentes de producción (Fig. 11). En lo relativo a su funcionalidad, se han podido identificar hasta ocho formas tipológicas diferentes. En relación con la preparación y almacenaje de alimentos, se han identificado ollas (316 fragmentos), cántaros (9), jarras/jarros (78) y tinajas (10). En cuanto a las formas de mesa, se han identificado 2 cuencos, 12 fragmentos de escudillas y 2 platos.

Fig. 11. Cuantificación del material según el tipo de pasta y el tipo de factura / Quantification of the material according to the type of paste and type of production.

3.2. Metales

El estudio de los materiales metálicos ha permitido la catalogación de 702 elementos, que cubren el periodo cronológico comprendido entre los siglos XI y XV, y que se han recuperado en distintas zonas del castillo (Fig. 12). El elemento más registrado es el hierro, siendo 8 de aleación de cobre y tan solo uno de plomo. Sus funcionalidades son variadas, destacando los elementos relacionados con actividades militares (Tab. II).

Fig. 12. Gráfico del registro metálico según su ubicación / Graph of the metallic elements according to their location.

Tabla II. Clasificación funcional de los elementos metálicos / Functional classification of metal elements.

CATEGORÍA FUNCIONAL

TIPOLOGÍAS

N.

PORCENTAJES

Elementos bélicos

Espadas, placas de armadura brigantinas, puntas de flecha, puntas de dardo de ballesta, proyectiles, puntas de lanza.

121

17 %

Elementos agropecuarios

Hoces, podaderas, fragmentos de cencerros.

8

1,10 %

Elementos relacionados con équidos.

Herraduras, clavos de herradura, hebillas de correas.

15

2,10 %

Adornos y elementos personales

Hebillas de cinturones, indeterminados, broches, anillos.

9

1,20 %

Elementos de construcción

Clavos, remaches, bridas.

301

42,80 %

Herramientas de trabajo

Cuchillos, cinceles.

4

0,50 %

Elementos de carpintería

Grapas, llaves y apliques.

12

1,7 %

Elementos productivos

Lingotes.

2

0,2 %

Indeterminados

Desconocidos, elementos oxidados…

230

33 %

3.3. Material numismático

Se han recuperado 17 ejemplares, que abarcan el periodo comprendido entre los siglos X y XV (Tab. III). De ellos, dos son de cronología plenomedieval y 15 bajomedieval (CAYÓN et al., 2005; CRUSAFONT, 1992; FERRARO y SALGADO, 1978; IBÁÑEZ y TABAR, 2001)19.

Tabla III. Monedas halladas en Irulegi / Coins found at Irulegi.

SIGLA

MONEDA

METAL

SOBERANO

CRONOLOGIA

ACUÑACIÓN

DLAMETRO (mm)

PESO (g)

IRU.02

Corona o sueldo

Plata

Carlos II de Navarra

1377-1379

Pamplona

22

2,04

IRU.03

Dinero

Vellón

Luis IV de Francia

936-954

Angouleme

19

0,84

IRU.04

Cornado o medio blanca

Cobre

Catalina de Foix y Juan III de Albret

1495

Pamplona

9/16

0,36

IRU.05

Cornado o medio blanca

Cobre

Catalina de Foix y Juan III de Albret

1495

Pamplona

15/16

0,62

IRU.06

Real

Plata

Enrique IV de Castilla

1454-1474

Sevilla

27

2,88

IRU.07

Medio real preto

Vellón

Alfonso V de Portugal

1454-1474

Oporto o Lisboa

17,5

1,02

IRU.08

Dinero de tours

Vellón

-

Siglo XIV

Navarra o Francia

15

0,49

IRU.09

Blanca

Vellón

Juan II de Trastámara

1441-1491

Posible

Pamplona

28

3,01

IRU.10

Cornado

Vellón

Carlos Principe de Viana

1441-1461

Pamplona

20

1,02

IRU.15

Cornado

Vellón

Carlos Principe de Viana

1441-1461

Pamplona

18

0,87

IRU.12

 

Vellón

-

XIV-XV

-

20

1,32

IRU.13

Cornado

Vellón

Juan II de Trastámara

1441-1479

-

17

0,74

IRU.14

Cornado

Vellón

Juan II de Trastámara

1441-1479

-

14,5

0,77

IRU.16

Cornado

Vellón

Juan II deTrastámara

1441-1479

-

18

0,78

IRU.17

-

Vellón

-

-

-

20

0,65

IRU.+.02

-

Vellón

-

-

-

-

-

IRU.+.01

Dinero Sanchete

Plata

Sancho VII el Fuerte

1194-1234

Pamplona

-

-

3.4. Restos arqueofaunísticos

La excavación ha proporcionado 2.617 restos arqueofaunísticos de los que se han identificado 1.772 (67,7% del total) (Tab. IV).

Tabla IV. Número de restos (NR) y porcentajes de cada unidad estratigráfica / Number of remains (NR) and percentages of each stratigraphic unit.

 

IDENTIFICADOS

NO IDENTIFICADOS

TOTAL

UE

NR

%

NR

%

NR

%

1002

877

70,7

357

29,3

1235

47,2

1003

2

 

2

 

4

0,15

1010

2

 

 

 

2

0,08

1011

109

88,6

14

11,4

123

4,7

1020

252

73,7

90

26,3

342

13,1

1022

168

63,6

96

36,4

264

10,1

1025

9

 

2

 

11

0,42

1026

2

 

6

 

8

0,31

2500

12

 

3

 

15

0,57

2503

7

 

3

 

10

0,38

4001

8

 

 

 

8

0,31

4002

50

83,3

10

16,7

60

2,3

4009

10

 

 

 

10

0,38

4010

4

 

 

 

4

0,15

4011

4

 

 

 

4

0,15

4015

2

 

 

 

2

0,08

4022

1

 

4

 

5

0,19

4035

11

 

 

 

11

0,42

4036

125

91,9

11

8,1

136

5,2

SN

117

32,7

241

67,3

358

13,7

TOTAL

1772

67,7

845

32,3

2617

 

Los restos identificados pertenecen a 12 especies: 6 domésticas (caballo, asno, bovino doméstico, oveja, cabra y cerdo) y 6 salvajes (ciervo, gato montés, marta/garduña, tejón, liebre y conejo). Hay también una gallina y otra que puede ser doméstica o salvaje (paloma). En general, se puede apreciar que en cuanto al peso, el ganado bobino es el que más aporta, seguido muy de cerca por el ganado ovicaprino (Tab. V).

Tabla V. Número de restos, número mínimo de individuos, peso y porcentajes de los mamíferos domésticos / Number of remains, minimum number of individuals, weight and percentages of domestic mammals.

 

NR

%NR

NMI

W(g)

%W

Equus coballus

3

0,3

1

43

1,2

Equus asinus

2

1

127

Bos taurus

324

18,9

11

6640

48,1

Ovis Capra

1265

73,8

 

6332

45,9

Sus domesticus

121

7,1

 

667

4,8

Gallus gallus

38

 

4

 

 

Cervus elaphus

1

 

1

 

 

Felis silestris

1

 

1

 

 

Martes sp.

5

 

1

 

 

Meles meles

1

 

1

 

 

Lepas europaeus

5

 

1

 

 

O. cuniculus

4

 

1

 

 

Columba sp.

1

 

1

 

 

Iberus sp.

1

 

1

 

 

Domésticos

1753

 

 

 

 

Resto vertebr.

19

 

 

 

 

NR total

1772

 

 

 

 

3.5. Industria ósea

La industria se reduce a 14 elementos, entre los que hay tres dados y una matriz para su fabricación, un posible silbato, una falange perforada, un hueso recortado, una cuña en asta de ciervo, dos piezas de marfil y cuatro clavijas óseas cortadas.

4. DISCUSIÓN

Los materiales permiten acercarse a la realidad cotidiana del castillo de Irulegi, así como a su naturaleza militar y de centro de poder. Esta información se puede resumir en: 1) trabajo y producción, 2) alimentación, 3) función militar, 4) elementos de ostentación y 5) ocio.

4.1. Trabajo y producción

Los registros materiales de Irulegi han proporcionado evidencias de distintas actividades productivas, representadas por la presencia de herramientas de trabajo en las estancias del sur y en el patio de armas. Por ejemplo, un cincel para trabajar la madera, otro para trabajar la piedra y dos cuchillos (Fig. 13). Todos se han recuperado en los niveles del siglo XV, un cuchillo y los cinceles en la primera estancia del sur y el otro cuchillo en el patio de armas, y se han venido utilizando desde siglos anteriores sin apenas modificaciones (IZQUIERDO, 2008: 197) y con paralelos en numerosos yacimientos europeos (cuchillos: ZABALA, 2003: 51; ORTEGA y ESQUEMBRE, 2011: 73; GOODALL, 2011: 114; y cinceles: BAYROU, 1990-1991: 75; GOODALL, 2011: 14; GONZÁLEZ, 2014: 197; ÁLVARO y TRAVÉ, 2019). El de los cinceles es un registro escaso pero significativo, puesto que pueden guardar relación tanto con el mantenimiento de las estructuras de madera del castillo como con su anulación o desmoche en 1494.

Fig. 13. Principales herramientas de Irulegi / Main tools found at Irulegi.

Ahora bien, la principal actividad productiva que puede inferirse a partir del registro material es la agropecuaria. Se han documentado cinco fragmentos de hoces, tres de ellos procedentes de niveles bajomedievales de la torre del homenaje y los otros dos del patio de armas; y dos podaderas halladas en niveles bajomedievales de la torre del homenaje (Fig. 14). Sus morfologías no han cambiado en contextos campesinos desde la Edad Media hasta la mecanización del campo en la segunda mitad del siglo XX (DEMIANS D´ARCHIMBAUD, 1981: 456; SANCHO PLANAS, 1992: 113; AMBLAS, et al., 2008: 504; GOODALL, 2011: 90, 98; MANSILLA, 2012: 317).

Fig. 14. Selección de útiles agrícolas de Irulegi / Selection of agricultural tools from Irulegi.

Aun siendo los castillos centros de poder, no hay que olvidar que nos hallamos ante una sociedad campesina y que este tipo de hallazgos no son infrecuentes en contextos militares parecidos (GAMBARO, 1985: 227; ORTEGA y ESQUEMBRE, 2011: 69). Las fuentes documentales (MARTINENA, 1994: 260) mencionan que algunos alcaides y los soldados tuvieron pequeñas huertas, a veces a modo de actividad de jardinería de ocio del alcaide. Estos hallazgos permiten interpretar la práctica de la agricultura ligada más a necesidades suplementarias que a actividades productivas significativas.

4.2. Los hábitos alimenticios a partir del registro faunístico y cerámico

El carácter de recinto fortificado de Irulegi refleja de alguna forma la estructura pecuaria del entorno rural. Los datos apuntan al predominio de restos de ungulados domésticos, con cierto equilibrio entre la cría de ganado mayor y las cabañas pastoriles como bases de aporte calórico de procedencia animal. Se observa la relevancia del ganado ovicaprino, que representa los dos tercios del número total de restos identificados. Sin embargo, su frecuencia relativa en peso es ligeramente menor que la del ganado mayor (Fig. 15).

Fig. 15. Histogramas de porcentajes del número de restos y de su peso de las cabañas domésticas / Histograms of the number of remains and their weight of the livestock.

En el entorno inmediato de Irulegi sirven como término de comparación los recintos fortificados de Aizorrotz (MARIEZKURRENA y ALTUNA, 1982), Gorriti (ZABALA, 2003), Ereño, Untzueta y Amaiur (CASTAÑOS y CASTAÑOS, 2017a; 2017b; 2018) (Fig. 16).

Fig. 16. Frecuencias relativas de cabañas domésticas de varios castillos del Reino de Navarra / Relative frequencies of livestock of various castles of the Kingdom of Navarre.

En el caso de los bóvidos de Irulegi se ha podido hacer una estimación de la estructura de la edad en 11 individuos (Tab. VI). Se observa un predominio de adultos y subadultos frente a los juveniles e infantiles, apuntando hacia un modelo de aprovechamiento de carácter mixto, en el que una parte de las reses se conservan hasta una edad en la que se pueden aprovechar productos de carácter secundario como la leche o la fuerza mecánica. En cuanto a su despiece, el modelo de descuartizado que más se ha podido apreciar ha sido el de las extremidades. En los cuartos delanteros la desmembración se realiza a nivel de la articulación entre la escápula y el húmero, así como en la articulación entre húmero y radio. En los cuartos traseros los cortes se hacen en la propia articulación de la cadera, entre fémur y tibia, y al final de esta última. Las patas concentran las marcas de corte en los metapodios, mientras que muchas falanges se conservan enteras. Su escasa cantidad de carne explica este tratamiento.

Tabla VI. Distribución de edad del bovino doméstico / Age distribution of domestic cattle.

DENTICIÓN

EDAD

NMI

COHORTES

D4+/-

0-3 meses

1

Infantil

M1+M2-

6-18 meses

1

Juvenil

M2+M3-

18-27 meses

2

M3 +

2,5-4 años

2

Subadulto

M3++

Mas 4 años

3

Adulto

M3+++

 

2

Total

 

11

 

En lo referente a los ovicápridos, se observa una mayor frecuencia de la cabra, con un número de 30 ejemplares frente a 22 ovejas. Estos datos pueden compararse con recintos defensivos o asentamientos rurales, como el desolado de Rada (CASTAÑOS, 2008), o urbanos como Correría 103/Pintorería y Correría 108 del casco histórico de Vitoria-Gasteiz (CASTAÑOS et al., 2012; 2013). Los resultados indican un predominio de la cabra frente a la oveja en los castillos, relacionado tal vez con el hecho de querer mantener limpio de malezas el espacio circundante a las defensas y con la menor exigencia alimentaria del ganado caprino respecto del lanar. La estimación de la edad de la oveja y de la cabra en esta muestra indica que el modelo de aprovechamiento también es de carácter mixto (Tab. VII). Hay 33 estimaciones que se distribuyen a lo largo de las distintas cohortes de edad con ausencia de individuos seniles, e indican que una parte del ganado menor ha sido utilizada como fuente directa de carne, mientras que otros se han aprovechado para la obtención de productos secundarios como leche, lana o reproducción (Tab. VIII).

Tabla VII. Proporción de restos oveja/cabra en yacimientos medievales de CAPV y Navarra / Proportion of sheep/goat remains in medieval deposits of CAPV and Navarra.

 

RADA

CORRERÍA/ PINTOR.

CORRERÍA. 108

AIZORROTZ

IRULEGI

UNTZUETA XII-XIII

UNTZUETA POSTM.

NRO/N RC

1,45

1,83

1,45

0,43

0,73

0,86

0,33

Tabla VIII. Estimación de la edad del ovicaprino / Estimation of sheep/goat age.

DENTICIÓN

EDAD

NMI

COHORTES

Ml-

0-3 meses

1

Infantil

M1+/-

3 meses

3

M1+M2-

3-6 mese

3

M2+/-

6 meses

2

M2+-M3-

9-15 meses

3

Juvenil

M3+/-

15-24 meses

2

Subadulto

M3 +

 

14

M3++

 

5

Adulto

Totales

 

33

 

En cuanto a los suidos, con 121 restos, el cerdo es la tercera cabaña doméstica más abundante, aunque a mucha distancia de las anteriores. Desde el punto de vista de la representación anatómica, está presente la mayor parte del esqueleto, aunque predominan los elementos craneales como consecuencia del elevado número de piezas dentarias sueltas. A partir del estado de sustitución dentaria y del desgaste de los últimos molares se ha podido estimar la edad de 6 individuos. Hay al menos un infantil, tres subadultos, un adulto y un ejemplar de edad avanzada. Entre adultos y subadultos hay dos hembras y dos machos. Como en los casos anteriores, el modelo de aprovechamiento de esta cabaña parece mixto, ya que los sacrificios se reparten por varias cohortes de edad.

La única especie aviar en Irulegi es la gallina doméstica, con 38 restos, fundamentalmente fragmentos de huesos largos. Hay un mínimo de dos individuos representados, uno de los cuales es un macho.

Por otra parte, solo se ha recuperado un fragmento de cuerna de ciervo, sin que se pueda relacionar con la caza, ya que presenta indicios de haber sido trabajado para su posible utilización como cincel o cuña.

El modelo de aprovechamiento pecuario de Irulegi es parecido al que se observa en Gorriti (ZABALA, 2003). Con predominio del ganado ovicaprino, seguido del vacuno y con el de cerda a mucha distancia. El predominio de ovicaprinos en Irulegi coincide, además, con lo observado en ocupaciones de carácter no defensivo como Rada (CASTAÑOS, 2008), las fases plenomedievales y sobre todo bajomedievales de los despoblados alaveses de Zornoztegi, Zaballa y la villa de Agurain-Salvatierra (GRAU, 2009; GRAU et al., 2016). En cuanto al origen y la movilidad de las tres principales especies de Irulegi, estudios de isótopos estables (δ13C, δ15N, δ13Cap y δ18Oap) de las principales especies de Irulegi (ovicaprinos, Bos taurus o ganadería bovina; y Sus scrofa o cerdo doméstico) señalan el origen foráneo de una parte significativa de la fauna descubierta (PÉREZ-RAMALLO, 2021). Esto, junto con el carácter defensivo de Irulegi, descarta una sustancial actividad ganadera en el lugar.

Otro aspecto relacionado con la alimentación es el acarreo, cocinado y mantenimiento de los alimentos, el cual en gran medida se hacía en recipientes cerámicos (Fig. 17). En Irulegi se han adscrito al periodo plenomedieval 254 fragmentos, que corresponden a 215 ejemplares, siendo el 18% de la cerámica estudiada. Son todo producciones sin revestir, en las cuales se identifican grupos de pasta descritos para zonas circundantes como Álava, como puede ser el grupo VI de Solaun (2005), (1011, 1013, 1022, 4002, 1002) que tiene una amplia cronología que comienza en el siglo VIII y termina en el XIII, aunque pervive de forma más minoritaria.

Fig. 17. Dibujos de las cerámicas más características de Irulegi / Drawings of the most characteristic ceramics of Irulegi.

Igualmente, se han reconocido ejemplares identificados como grupo II (siglos VIII-XI) (4002, 1003), así como del grupo V, que perdurará hasta época moderna (Escribano, 2014) (1022, 1002). En este tipo de vajilla las ollas son mayoritarias, con 28 ejemplares identificados (con 27 indicios de exposición al fuego), entre las que encontramos diversas tipologías: ollas de borde moldurado, así como bordes verticales con labio redondeado y reborde para tapadera o bordes salientes y labios apuntados. Contamos con un único cántaro, con asa de cinta, así como 4 jarros hallados en contextos bajomedievales de la primera estancia del sur, uno de los cuales presenta un paralelo en los siglos XI-XIII en Vitoria-Gasteiz (SOLAUN, 2005: 181). En los demás registros escasean los materiales de cronología plenomedieval y este conjunto cerámico señala una ocupación más que anecdótica para ese periodo.

En las producciones vidriadas bajomedievales, las ollas son la pieza más representada, con un total de 159 ejemplares. Mayoritariamente de dos tipos: 1. Las realizadas en pasta grosera, sin revestir, con borde moldurado redondeado y presencia de al menos un asa de cinta, documentada en ejemplares de Urraul y Sangüesa (JUSUÉ y TABAR, 1988). Se han recuperado en unidades de derrumbe general del castillo, en niveles bajomedievales sobre el enlosado y en el interior de la torre del homenaje y sobre todo en niveles del siglo XV de la primera estancia del sur. 2. Las realizadas con pastas más depuradas, con reborde interior para tapadera. Hay paralelos cercanos para las ollas y jarros vidriados, con boca estrecha y asa saliente del mismo borde, ambos en las mismas cronologías, y perdurando hasta el siglo XVI (AZNAR, 2016). Se han hallado en niveles generales de derrumbe, pero sobre todo en niveles del siglo XV de la primera estancia del sur. Las tonalidades del vidriado pueden variar desde el amarillo o melado al marrón, pasando por el verde (Fig. 18). Se han identificado en niveles del siglo XV de la primera estancia del sur varios fragmentos que presentan decoración estampillada, con motivos florales y geométricos, así como decoración de pequeños botones aplicados. Así pues, las tipologías más recientes no exceden el periodo de ocupación propuesto para el castillo (AIESTARAN et al., 2020) y se asocian sobre todo con elementos de cocina y almacenaje y, en menor número, también con el servicio de mesa.

Fig. 18. Tonos vidriados más característicos de Irulegi / Most characteristic glazed tones of Irulegi.

4.3. La función militar del castillo

Como cualquier castillo medieval Irulegi revestía una serie de funciones ligadas al control del territorio, que se traducen en la existencia de objetos relacionados con actividades militares. Destaca, en particular, el armamento, tanto defensivo como ofensivo. Elemento inseparable de la sociedad feudal, revestía también una dimensión de ostentación y de poder; algunos con un minucioso trabajo artesanal (GUTIÉRREZ, 2003: 233).

Entre el armamento ofensivo, destacan las puntas de flecha y dardos, así como un gancho para cargar la ballesta hallado en el nivel plenomedieval bajo el enlosado del vestíbulo. La mayoría de las puntas se han recuperado en el nivel datado entre 1400 y 1450 de la torre del homenaje, aunque también han salido en niveles previos de la misma torre y en niveles de derrumbe general del castillo. La importancia de los arqueros y ballesteros en la infantería de la Baja Edad Media fue crucial, puesto que la principal táctica de guerra se basaba en el desgaste. Los arcos fueron utilizados desde la Prehistoria y mantenían su importancia en los siglos XIII-XIV. Las ballestas aparecen en la Península Ibérica por primera vez en el siglo XI y su desarrollo fue notable en el bajomedievo (GONZÁLEZ, 2011: 146; SERDÓN, 2005). Una de las enormes ventajas del arco frente a la ballesta era que se podía cargar con facilidad y en muy poco tiempo (SOLER, 1993: 61-65).

En Irulegi se han hallado 39 puntas de varias tipologías (Fig. 19).

Fig. 19. Distintas tipologías de las puntas de flecha y dardo de ballesta de Irulegi / Different typologies of Irulegi arrowheads and crossbow heads.

1. Dos puntas de flecha de enmangue peduncular (Fig. 19.3), del siglo XIV (GONZÁLEZ, 2014: 83).

2. Tres puntas de flecha de enmangue tubular, sección cuadrangular y morfología fusiforme (Fig. 19.2), más ligera que la anterior y atendiendo a su tipología, conocida desde el siglo XIII (JESSOP, 1996: 195; DE LUCA y FARINELLI, 2002: 475).

3. Una punta de flecha incendiaria de enmangue peduncular y una única aleta por su tipología conocida en yacimientos militares romanos (Fig. 19.1), propia de la fase final de la Edad del Hierro del poblado de Irulegi (AIESTARAN et al., 2020).

4. Once puntas de enmangue tubular, de sección cuadrangular y morfología fusiforme (Fig. 19.6-7) que han sido halladas en contextos del siglo XIV y son en general de dimensiones discretas (JESSOP, 1996; DE LUCA y FARINELLI, 2002; SERDON, 2005). Este tipo de puntas se ha encontrado tanto en zonas cercanas (ÁLVARO y TRAVÉ, 2019) como en Italia o Gran Bretaña (JESSOP, 1996: 195; DE LUCA y FARINELLI, 2002: 475). Fueron muy útiles para dañar al enemigo que se protegía con cotas de malla.

5. Una punta de flecha de arco, corta, de enmangue tubular y morfología foliácea (Fig. 19.4) y otra punta igual pero más larga (Fig. 19.5) que puede ser de dardo de ballesta, como las encontradas en Gran Bretaña, Italia o Francia en contextos del siglo XIII (DEMIANS D´ARCHIMBAUD, 1981: 445; JESSOP, 1996: 195; DE LUCA, 2004: 404).

6. Tres puntas de enmangue tubular que, tras un cuello más fino que el enmangue, tienen una cabeza bipiramidal de sección cuadrada, pero de tamaño reducido (Fig. 19.8-9).

7. Diecisiete puntas de la misma morfología que el tipo 6 pero de mayor tamaño (Fig. 19.10-11). Las pequeñas pueden ser puntas de flecha y las más grandes puntas de dardos de ballesta (DEMIANS D´ARCHIMBAUD, 1981: 446; DE LUCA, 2004: 407).

Siguiendo con las ballestas, se recuperó un gancho para cargarlas (Fig. 20), que se fecha entre los siglos XII-XV (DEMIANS D´ARCHIMBAUD, 1981; SERDON, 2005). Son utilizados hasta que se generalizan métodos de cargado mediante manivelas o manillas. Dos paralelos han sido hallados en los castillos de Mendikute (Albiztur) y de Jentilbaratza (Ataun) (ÁLVARO y TRAVÉ, 2019), ambos en Gipuzkoa. En Navarra se ha recuperado uno de aleación de cobre en el castillo de Aitzita (Sesma y García, comunicación personal).

Fig. 20. Gancho para cargar ballesta hallado en el castillo de Irulegi / Hook to load the crossbow found at Irulegi.

Por otra parte, en Irulegi han aparecido dos puntas de lanza (Fig. 21). La primera punta se halló sobre el enlosado del siglo XV del patio de armas y es alargada, de enmangue tubular para su inserción en el asta y de sección cuadrangular maciza. Aparecen paralelos en la primera mitad del siglo XIV en el castillo de Mendikute (ÁLVARO y TRAVÉ, 2019) o Beloaga (AGIRRE-MAULEON, 2017b). La segunda, hallada en el nivel datado entre 1400 y 1450 de la torre del homenaje, debió de ser de una lanza pesada, utilizada en las cargas de caballería (ayudando la sujeción del mismo con la axila y apoyado en el antebrazo) a modo de choque entre los siglos XII y XIV, aunque se siguió utilizando también en la infantería (SOLER, 1993: 35). En Rada se han hallado puntas de lanza de tamaño algo mayor y similar cronología (TABAR, 1991-1992: 384).

Fig. 21. Puntas de lanza de Irulegi / Spearheads of Irulegi.

Asimismo, en Irulegi han llegado restos y elementos relacionados con el caballo, el cual no se utilizó como alimento. De sus restos óseos las únicas evidencias son sendos molares superiores e inferiores y un fragmento proximal de fémur que pueden corresponder a un mismo individuo adulto. Igualmente se han podido identificar 15 elementos metálicos (Fig. 22) que guardan relación con los équidos. Se han hallado sobre todo en niveles bajomedievales de la estancia del norte y, de forma ocasional, en los niveles bajomedievales de la torre del homenaje y la primera estancia del sur y sobre el enlosado del patio de armas: dos hebillas de correa, tres herraduras, que siguen la morfología de las tipologías posteriores a 1350, y ocho clavos de herradura que atienden a morfo-tipologías datadas entre los siglos XIII-XVI (CLARK, 2004: 100). Las dos hebillas de este apartado siguen las tipologías de correas y hebillas de los asientos de los caballos. Ambas son de hierro y la primera mantiene incluso la aguja (GAMBARO, 1985: 234; GOODALL, 2011: 364). La segunda mantiene la placa que lo sujetaba a la correa de cuero. El caballo pudo ser utilizado para las labores cotidianas de transporte o el acarreo de materiales o instrumentos agrícolas, pero, dado el contexto, la existencia de restos óseos y elementos metálicos relacionados con los équidos debe interpretarse en el marco de las actividades bélicas en el castillo, tal y como se ha documentado también en otros ejemplos ingleses y peninsulares (CLARK, 2004; SOLER, 1993).

Fig. 22. Elementos característicos relacionados con équidos / Characteristic elements related to equids.

En cuanto a las espadas, se encuentran diez fragmentos de espadas cortas de un solo filo o dagas hallados sobre todo en niveles bajomedievales de la torre del homenaje, la primera estancia del sur y las estancias del norte; y una de espada larga hallada en el nivel datado entre 1400 y 1450 de la torre del homenaje (Fig. 23). Las primeras se utilizaban con una única mano, tanto para cortar como para ensartar, y cubren casi la totalidad del periodo medieval con muy pocas variaciones morfológicas, siendo comunes en territorios colindantes (ZABALA, 2003: 46). La espada larga, más cara y costosa de realizar, era considerada en la mentalidad de la época el arma de la aristocracia, los caballeros y los nobles. No tiene una punta especialmente fina y la hoja es fuerte y ancha. Por ello, su principal función sería la de golpear o cortar al enemigo. Este tipo también es bastante común (SARASOLA y MORAZA, 2011: 84 y 130; AZKÁRATE y CAMINO, 2013: 55), con ligeros cambios en la morfología a finales del medievo (OAKESHOTT, 1991: 113; SOLER, 1993).

Fig. 23. Tipología de espadas de Irulegi / Typology of the swords of Irulegi.

Entre el armamento defensivo, el elemento más destacado es la armadura. Entre ellas, se han hallado 46 placas de armadura brigantina, diferenciándose las placas sin remaches, las que tienen remaches de hierro y las que tienen remaches sobredorados como decoración (Fig. 24). Casi la totalidad de las piezas se han recuperado en el nivel datado entre 1400 y 1450 de la torre del homenaje y niveles algo anteriores a él, aunque también se ha hallado alguna en niveles bajomedievales sobre el enlosado de la zona este y los edificios del norte. Este tipo de armadura empezó a generalizarse en torno a 1370 y su aparición está relacionada con el desarrollo de la ballesta y el arco largo o longbow (ESCALINI, 2004: 395). Se ha solido tomar como una armadura de transición entre la cota de malla y la de grandes placas (SOLER, 1993: 132).

Fig. 24. Tipología de placas brigantinas de Irulegi / Type of brigantine plates of Irulegi.

Para el Reino de Navarra el desarrollo de la armadura comenzó entre 1300-1350. En Castilla (GONZÁLEZ, 2014: 194) y la actual Cataluña (ORTEGA y ESQUEMBRE, 2011: 79) han aparecido, a pesar de que el mayor número se halle en Italia, en los siglos XIV y XV (ESCALINI, 2004: 393). Como en Italia, en la Península Ibérica las armaduras de grandes placas o arneses que cubren la totalidad del cuerpo son más tardías, y la utilización de la armadura llamada “ligera” se extiende más en el tiempo (SOLER, 1993: 197). En este sentido, además de algún posible aro de cota de malla, en Irulegi hay varias placas brigantinas decoradas con remaches sobredorados y una de ellas conserva, por oxidación, restos de la tela de lino que la cubría. Este elemento (19/10.1011.16) y otros hallados en Italia (ESCALINI, 2004: 383) nos muestran que estas placas se unían entre ellas mediante varios remaches, e iban unidas entre dos prendas de lino o cuero. Una vez puesto, sería similar a un chaleco con los remaches visibles y las placas de hierro ocultas en su interior.

Otros elementos defensivos hallados en Irulegi han sido diez abrojos, artefactos utilizados desde la antigüedad hasta la época contemporánea para colocar en terrenos en los que se esperaba un ataque. Es curioso que solamente se hayan recuperado en niveles bajomedievales de la torre del homenaje y la primera estancia del sur, y no cerca de la muralla perimetral. Tal vez tenga que ver en esto el final intencionado al desmochar el castillo, ya que, de tratarse de un final violento, sería normal hallar este tipo de elementos en lugares de paso cercanos a la muralla. En Navarra han aparecido en yacimientos bajomedievales como Rada o el Castillo de Amaiur (AGIRRE-MAULEON, 2017a) y en Italia en los siglos XIV y XV (ERMETTI, SACCO y VONA, 2008: 165).

Los registros numismáticos son escasos (17 ejemplares), y reflejan la escasa monetización de la economía bajomedieval. Se pueden relacionar con la presencia de élites militares, el pago por sus servicios y el cobro de rentas, tal y como mencionan las fuentes escritas (MARTINENA, 2017).

La moneda más antigua pone de relieve un término post quem para la cronología del castillo, que se ubica en los años 936-954, el cual coincide con las dataciones radiocarbónicas más antiguas del yacimiento (AIESTARAN et al, 2020). Dicha moneda se recuperó en un nivel plenomedieval de las estancias del norte; y las demás se reparten entre distintos niveles bajomedievales de la torre del homenaje, el patio de armas y las estancias del sur. Asimismo, es subrayable que no haya ejemplares más recientes que 1494, año del desmoche del castillo por los últimos soberanos del Reino de Navarra, Catalina de Foix y Juan de Albret (Fig. 25).

Fig. 25. Materiales numismáticos medievales de Irulegi / Medieval numismatic materials of Irulegi.

El 84,2% de los ejemplares hallados corresponden a monedas menudas de mediados del siglo XV, época de gran inestabilidad provocada por la guerra civil que asoló el Reino. Descrita como de anarquía monetaria (Ibáñez 1998), las monedas circulan por su metal módulo y peso, independientemente de su lugar de acuñación, tal y como se mostró en el caso de la villa de Rada (TABAR e IBÁÑEZ, 1994; IBÁÑEZ y TABAR, 2001). Es entonces cuando Irulegi fue una fortaleza concurrida por soldados de ambos bandos, por lo que puede guardar relación con el elevado número de hallazgos monetales del siglo XV.

4.4. Elementos de ostentación

Se han incluido en esta clasificación los adornos, las cerámicas de servicio y dos elementos de marfil.

Entre los elementos cerámicos únicamente tres fragmentos hallados en los niveles bajomedievales de la primera estancia del sur componen este grupo. Se trata de un plato y una forma abierta, ambos esmaltados, realizados a torno rápido y con decoración en verde y manganeso en un caso, y únicamente en verde en el segundo. Su escasez se explica porque el castillo de Irulegi se desmocha cuando comienza a generalizarse el uso de la vajilla de mesa esmaltada.

Los elementos metálicos que se incluyen como adornos son dos hebillas de cinturón, un elemento de anclaje, dos adornos de correas o vestimenta, un anillo y un broche (Fig. 26). Estos elementos hallados en su mayoría en los niveles bajomedievales de la torre del homenaje pudieron ser transmitidos de generación en generación por su naturaleza personal.

Fig. 26. Adornos hallados en Irulegi / Ornaments founded in Irulegi.

El anillo es de aleación de cobre y de tipología antigua. El broche de sección cuadrangular es de hierro y se conserva mal. Su cronología estratigráfica lo sitúa en el siglo XV, con numerosos paralelos en un amplio territorio. Por otro lado, se han recuperado varios adornos de correas o vestimenta, típicos de la soldadesca (DEMIANS D´ARCHIMBAUD, 1981: 482-483; PADILLA, 2002; BELLI, 2003: 418; BALLARIN, 2007: 131; ÁLVARO y TRAVÉ, 2019).

En cuanto al elemento de anclaje, destaca su ornamentación (sigla 19/10.1002.34). La pieza de aleación de cobre tiene una doble curvatura y su morfología es estrecha, hueca y alargada (2,5 cm de anchura, 0,85 cm de grosor y 11,5 cm de largura), como para pasar una correa en su interior. Podría tratarse de un posible tahalí que iría articulado por sus dos extremidades. En el extremo izquierdo parece que el sistema de engarce fuera mediante remaches, pero en el derecho tiene un rebaje circular, posiblemente para engarzar un botón que iría anclado a la vaina de la espada (Fig. 27). Tiene dos bandas de decoración de esmalte pintado con motivos de zarcillos o palmetas angulosas y en el centro una banda nielada de tonalidad plateada. La pieza está formada mediante la unión de dos placas, una única placa de 3 mm de grosor que comprende las partes superiores y laterales, y la placa inferior de 1 mm de grosor. Puede considerarse de lujo, de ostentación, de prestigio y riqueza. Se ha hallado el fragmento de un elemento similar, en un contexto parecido, en el castillo de Amaiur (AGIRRE-MAULEON, 2017a).

Fig. 27. Imagen del elemento 19/10.1002.34 / Image of element 19/10.1002.34.

En cuando a las dos hebillas comunes de aleación de cobre, la mejor conservada tiene una anchura y largura de 3,5 cm. Ambas pudieron utilizarse como cierre de correas o bolsas (GONZÁLEZ, 2011: 366) y se conocen abundantes paralelos bajomedievales (BELLI, 2003: 421; ORTEGA et al., 2013: 153).

Finalmente, es destacable la presencia de dos objetos fabricados sobre marfil (Fig. 28), hallados en contextos estratigráficos de desmoche. El primero ha sido hallado en la primera estancia del sur (sigla 19/11.1020.811) y fue extraído de una rodaja transversal de una defensa de elefante. Es un fragmento de una placa circular torneada, con perforación en rosca en el centro, decorada con círculos concéntricos y motivos geométricos. Los círculos concéntricos forman una serie de frisos rellenos de motivos geométricos (cuadrados, líneas, dientes de sierra) o lisos, pero de perfil convexo o cóncavo. El trabajo se ha realizado moldeando la silueta de los frisos mediante torno y gubia y, posteriormente, la decoración geométrica por técnica excisa. La cara ventral es lisa, está regularizada y muestra marcas del trabajo a torno (leves círculos concéntricos). La pieza incompleta formaría un disco de al menos 110 mm de diámetro.

Fig. 28. Piezas de marfil halladas en el castillo de Irulegi / Pieces of ivory founded in the castle of Irulegi.

El segundo elemento fue hallado en las estancias del norte y es una pieza de marfil (sigla 19/08.1002.1337) en forma de T, extraída de una tableta radial de una defensa de elefante. La arista superior presenta una serie de surcos aserrados, cuatro parejas de surcos en diagonal en direcciones opuestas en forma de “v” invertida, separadas a intervalos regulares, en los que hay otros cuatro surcos transversales más someros. Presenta un acabado muy cuidado, con las superficies alisadas y parece que con pulido de uso en las incisiones. Desconocemos cuál pudiera ser su función o utilidad, pero por su morfología pudiera tratarse de un puente de un instrumento musical de cuerda.

El marfil es un material noble y escaso, reservado principalmente para objetos suntuosos o religiosos. Por ello es muy reseñable la presencia de dos objetos de este material de alto valor simbólico y económico, a todas luces importados, en la fortaleza de Irulegi.

Entre las piedras en las que se asentaba el altar de la capilla se encontró un elemento singular, un adorno con perforaciones laterales para su fijación en una caja de madera de pequeñas dimensiones utilizada, quizás, en actos religiosos (Fig. 29). Ubicado bajo el altar, este tipo de cajitas solía albergar los restos que consagraban el espacio religioso. Crono-tipológicamente señala un periodo altomedieval o plenomedieval (BELLI, 2003; ERMETTI, SACCO y VONA, 2008; ZAGARI, 2005). Paralelos regionales de estos adornos repujados y sobredorados de carácter seriado se han hallado también en el castillo de Mendikute (ÁLVARO y TRAVÉ, 2019).

Fig. 29. Elemento de decoración hallado entre las piedras de la base del altar de Irulegi / Element of decoration found between the stones of the base of the altar of Irulegi.

4.5. El ocio en el castillo de Irulegi

Los registros materiales del yacimiento se completan con algunos elementos que pueden relacionarse con actividades de ocio. Entre estos destacan los tres dados completos de forma cúbica, dos de ellos hallados entre el enlosado del vestíbulo y el último en el nivel contiguo de las estancias del norte, extraídos probablemente de un metápodo de Bos taurus. La disposición de las numeraciones corresponde a la forma “clásica” de caras opuestas que suman 7 (1-6/2-5/3-4) y, en cuanto a la orientación de las marcas, se corresponden con el modelo n. º 7 de Poplin (2011). Junto a estos dados se ha hallado una matriz para su fabricación (Fig. 30.1-4). Son objetos representativos de las actividades de distracción de la soldadesca de las fortalezas medievales, que emplean los largos tiempos muertos de descanso para el juego (ÁLVARO et al., 2017: 274).

Fig. 30. Dados, matriz y posible silbato hallados en el castillo de Irulegi / Dice, matrix and possible whistle found in the castle of Irulegi.

Se han recuperado dados de las mismas características en los castillos roqueros de Mendikute (Albiztur), Ausa (Zaldibia) o Jentilbaratza (Ataun) en Gipuzkoa, donde además había evidencias de toda la cadena de producción (ARRESE, 2010; ÁLVARO et al., 2017; ÁLVARO y TRAVÉ, 2019). En el castillo navarro de Gorriti también se han documentado elementos de todas las fases de producción, pero ningún dado (ZABALA, 2003).

A la misma categoría de ocio podría corresponder un posible silbato fabricado sobre una ulna de ave (posiblemente Ansar ansar) hallado sobre el enlosado del patio de armas (Fig. 23.5), ya que así se describen ejemplares medievales de características casi idénticas en Inglaterra (LEAF, 2008: 117).

6. CONCLUSIONES

En el presente trabajo se han presentado y discutido distintos restos arqueológicos que retratan la sociedad feudal de un centro de poder en el corazón del Reino de Navarra desde finales del siglo XI a 1494. Su principal función era la de control y defensa del territorio, por lo que abundan los elementos bélicos (puntas de flecha y de ballesta), cuyos efectivos aumentan debido a las guerras de finales del siglo XIV y a la guerra civil del siglo XV. Además, hay un escaso pero representativo número de elementos numismáticos que pueden proceder de pérdidas casuales de los soldados durante las refriegas o por otras razones.

Pero, más allá de las actividades bélicas, en Irulegi se han documentado objetos (principalmente, dos elementos de marfil) poco comunes en las caracterizaciones habituales de los materiales arqueológicos de los castillos medievales, signo de cierta ostentación, y relacionados con el ocio y/o la religión. Este hecho invita a reforzar la idea de que Irulegi fue un castillo neurálgico, entre otras razones por su proximidad a la capital del Reino. Es posible también que elementos de ostentación como los presentados no hayan aparecido en otros castillos medievales, precisamente porque, dado su valor, hubieran sido recogidos antes de su abandono y que los de Irulegi estuvieran abandonados por su deterioro en las fechas del desmantelamiento.

Finalmente, hay que señalar que se han obtenido datos interesantes sobre la vida cotidiana, como los referentes a la alimentación de base animal de los habitantes del castillo. El patrón de aprovechamiento pecuario en las tres cabañas principales parece de tipo mixto, con algunos individuos de origen foráneo sacrificados para el consumo directo de carne, junto a otros conservados hasta edades avanzadas para la obtención de productos secundarios. En cuanto a la agricultura, se observa que era una actividad complementaria. Por otra parte, se ha atestiguado que, para las actividades de mantenimiento, cocinado y consumo de víveres se utilizaban recipientes cerámicos comunes durante toda su ocupación.

En general, se puede apreciar que los registros materiales coinciden con los datos obtenidos desde la arquitectura y las fuentes escritas, en cuanto a los aspectos previamente señalados.

Este tipo de trabajos centrados en el estudio de los distintos materiales recuperados en un yacimiento son fundamentales a la hora de avanzar en el conocimiento, tanto de los mismos materiales, como de los yacimientos excavados. Por desgracia, aún no contamos con grandes síntesis de referencia para el entorno de lo que fuera el Reino de Navarra que faciliten el trabajo de los especialistas.

Es cierto que el número de excavaciones que se realizan aumenta cada año, pero, sin embargo, la mayor parte de ellas quedan inéditas y es muy escaso el número de ocasiones en las que salen a la luz, y aún más los casos en los que estas memorias incluyen un apartado dedicado el estudio de los materiales.

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8. ANEXOS

Tabla I: Descripción de unidades estratigráficas de Irulegi / Description of the stratigraphic units of Irulegi.

UE

TIPO

DESCRIPCIÓN

UE ANTERIOR

UE POSTERIOR

CRONOLOGÍA

1001

Depósito

Depósito

Superficial

1002

Bajomedieval

1002

Depósito

Derrumbe

1001

1138

Bajomedieval

1003

Depósito

Nivel de arcilla compacta bajo el enlosado

1190

1005

Bajomedieval

1004

Roca natural

Roca de calcarenita

1130, 4035

Ninguno

Triásico

1005

Depósito

Nivel de tierra compacta con pequeños fragmentos de piedra

1003

1140

Bajomedieval

1006

Depósito

Nivel de tierra de tonalidad marrón con inclusiones de carbón

1005

1004

Edad del hierro

1010

Depósito

Relleno que colmataba el perímetro interior de la torre principal

1001

1011

Bajomedieval

1011

Depósito

Arcilla compacta con zonas de quemado y materiales constructivos

1010

1012, 1123

Bajomedieval

1012

Depósito

Nivel de argamasa húmeda

1011

1013

Bajomedieval

1013

Depósito

Nivel de arcilla marrón

1012

1014

Bajomedieval

1014

Depósito

Relleno de tierra muy suelta

1013

1015

Plenomedieval

1015

Depósito

Relleno de tierra muy compacta

1014, 1016

1004

Plenomedieval

1016

Depósito

Relleno de tierra suelta

1123

1015

Plenomedieval

1020

Depósito

Nivel de arcilla compacta

1002

1021, 1123, 1124, 1121, 1125

Bajomedieval

1021

Depósito

Nivel de argamasa de la estancia sur I

1020

1022

Bajomedieval

1022

Depósito

Relleno de arcilla de preparación

1021

1023, 1127

Bajomedieval

1023

Depósito

Nivel de argamasa

1022

1025

Plenomedieval

1024

Depósito

Nivel de arcilla rojiza

1127

1025, 1126

Plenomedieval

1025

Depósito

Nivel carbonoso

1023

1026

Plenomedieval

1026

Depósito

Nivel de tierra suelta con cascajos y fragmentos de cerámica

1025

1028

Plenomedieval

1027

Depósito

Nivel de arcilla compacta de tonalidad amarillenta

1029

1028

Plenomedieval

1028

Depósito

Nivel de arcilla intercalada con gran cantidad de cascajos

1021, 1026, 1027

1029

Plenomedieval

1029

Depósito

Nivel de argamasa

1128

1027

Plenomedieval

1030

Depósito

Nivel de derribo que colmata el aljibe

1138

1131

Plenomedieval

1101

Estructura

Enlosado del castillo

1002

1102, 1103

Bajomedieval

1102

Estructura

Muro interno del recinto superior amurallado

1101

1104

Bajomedieval

1102

Estructura

Muro interno

1002

1101

Plenomedieval

1103

Estructura

Murete de aparejo irregular

1101

1191

Bajomedieval

1104

Estructura

Murete de aparejo irregular

1102, 1103

1191

Bajomedieval

1120

Estructura

Torreta sur

1140

1121, 1122

Plenomedieval

1121

Estructura

Saetera oeste

1020

1022

Bajomedieval

1121

Estructura

Saetera oeste

1120

4035

Plenomedieval

1122

Estructura

Saetera este

1120

4035

Plenomedieval

1123

Depósito

Nivel de argamasa de la estancia sur I.

1020

1022

Bajomedieval

1123

Estructura

Muro de la estancia sur

4008

4009

Bajomedieval

1123

Estructura

Murete interno

1011

1016

Plenomedieval

1124

Depósito

Nivel de arcilla rojiza

1020

1022

Bajomedieval

1125

Estructura

Acceso cegado

1020

1022

Bajomedieval

1126

Estructura

Murete de aparejo regular

1024

1128

Plenomedieval

1127

Estructura

Supuesto resto de estructura formada por tres grandes bloques

1022

1024

Plenomedieval

1128

Estructura

Losas de piedra

1126

1029

Plenomedieval

1129

Estructura

Solera de la torreta

1028

1004

Plenomedieval

1130

Negativo

Agujero del aljibe

1132

1004

Plenomedieval

1131

Estructura

Paredes de ladrillo del aljibe

1030

1137

Plenomedieval

1132

Estructura

Sillares del aljibe

1137

1133

Plenomedieval

1133

Estructura

Ménsula del aljibe

1132

1134

Plenomedieval

1134

Estructura

Ménsula del aljibe

1133

1135

Plenomedieval

1135

Estructura

Ménsula del aljibe

1134

1136

Plenomedieval

1136

Estructura

Ménsula del aljibe

1135

1131

Plenomedieval

1137

Estructura

Acceso escalonado del aljibe

1131

1132

Plenomedieval

1138

Estructura

Recerco exterior de piedra del aljibe

102

1030

Plenomedieval

1139

Negativo

Hueco habilitado en el extremo sureste de la base del aljibe

1131

1132

Plenomedieval

1140

Estructura

Murallas perimetrales del recinto superior amurallado

1002

1150

Plenomedieval

1150

Estructura

Ábside de la capilla

1140

1212

Plenomedieval

1150

Estructura

Torreta sureste

1140

Ninguno

Plenomedieval

1170

Estructura

Torreta del suroeste

1140

1171, 1172

Plenomedieval

1171

Estructura

Saetera sur

1170

4035

Plenomedieval

1172

Estructura

Saetera norte

1170

4035

Plenomedieval

1180

Estructura

Torreta noroeste

1140

1181

Plenomedieval

1181

Estructura

Saetera oeste

1180

4035

Plenomedieval

1190

Estructura

Recinto interior

1191

1003

Bajomedieval

1191

Estructura

Acceso del muro interno

1104

1190

Bajomedieval

1212

Estructura

Muro de cierre de la capilla

1150

1215

Plenomedieval

1213

Estructura

Nivel de argamasa de la capilla

1216

1214

Plenomedieval

1214

Estructura

Nivel de tierra compacta con pequeños fragmentos de piedra.

1213

4035

Plenomedieval

1215

Estructura

Estructura de separación de la nave

1212

1216

Plenomedieval

1216

Estructura

Base del altar de la capilla

1215

1213

Plenomedieval

2001

Depósito

Igual a 1001

Superficial

2110, 1002

Bajomedieval

2110

Estructura

Falsabraga

2001

4035

Bajomedieval

2501

Estructura

Nivel de mortero de cal sobre la que se asienta la muralla principal

1140

1004

Bajomedieval

4002

Depósito

Depósito limo-arenoso

1002

4011, 4004, 4003

Bajomedieval

4003

Depósito

Solera de argamasa de color amarillenta

4002

4054

Bajomedieval

4004

Negativo

Unidad negativa de agujero de poste

4002

4005

Plenomedieval

4005

Depósito

Relleno de agujero de poste

4004

4028, 4026

Plenomedieval

4008

Estructura

Base de sillares colocados en seco

4011

1123

Bajomedieval

4009

Depósito

Arcilla limpia de color gris claro

1123

4019

Bajomedieval

4011

Depósito

Solera de argamasa de color amarillento

4002

4008

Bajomedieval

4015

Depósito

Tierra arcillosa rubefactada de color rojo-granate

4022

4018

Plenomedieval

4016

Estructura

Lajas de calcarenita que cierran el horno

4017

4023

Plenomedieval

4017

Estructura

Ripios y lajas pequeñas del horno

4018

4016

Plenomedieval

4018

Estructura

Lajas pequeñas fragmentadas y rubefactadas del horno

4015

4017

Plenomedieval

4019

Depósito

Depósito lomo-arcilloso con abundante carbón

4009

4020

Plenomedieval

4020

Estructura

Lajas de calcarenita entre el sedimento carbonoso del horno

4019

4021

Plenomedieval

4021

Depósito

Depósito de arena compacta y limpia

4020

4022

Plenomedieval

4022

Depósito

Tierra limosa de color oscuro y abundante carbón

4021

4015

Plenomedieval

4023

Depósito

Nivel de arena bioclástica

4016

4024

Plenomedieval

4024

Depósito

Nivel de arena compactada y concrecionada

4023

4029

Plenomedieval

4026

Depósito

Nivel de arcilla rubefactada

4005

4033

Plenomedieval

4028

Depósito

Nivel de arcilla beige

4005

4033

Plenomedieval

4029

Depósito

Arena húmeda y abundantes cantos rodados

4024

4030

Plenomedieval

4030

Depósito

Nivel arcilloso-limoso

4029

1140

Plenomedieval

4031

Estructura

Laja de delimitación en la estancia sur II

4033

4032

Plenomedieval

4032

Negativo

Corte en la roca natural para delimitar la estancia sur II

4031

1140

Plenomedieval

4033

Estructura

Paquete de yeso de la estancia sur II

4028, 4026

4031

Plenomedieval

4034

Estructura

Gozne dela entrada principal del noroeste

1002

4056

Plenomedieval

4035

Estructura

Tierra entre las piedras de la base del altar

1214

1004

Plenomedieval

4036

Depósito

Tierra limosa no muy compacta y muy orgánica

1002

4053

Plenomedieval

4050

Estructura

Estructura circular del ámbito del noroeste

1002

4051

Bajomedieval

4051

Depósito

Arcilla compacta de color marrón anaranjado que aparece rubefactada

4050

1004

Bajomedieval

4052

Estructura

Losa de calcarenita

1002

4053

Bajomedieval

4053

Estructura

Murete interno de la zona noroeste

4036

1004

Plenomedieval

4054

Estructura

Muro interior que delimita el patio de armas

4003

1140

Bajomedieval

4054

Estructura

Murete interno del patio de armas

1101

1004

Plenomedieval

4056

Estructura

Posible cimentación de acceso del noroeste

4034

4035

Plenomedieval

_______________________________

1. Este artículo se enmarca en una Tesis Doctoral becada con la ayuda de la UPV/EHU PIF 2019, participado por el Grupo de Investigación n Prehistoria IT-1223-19. Los autores reconocen el trabajo de todas las personas que han participado en el proyecto. Agradecemos al Ayuntamiento del Valle de Aranguren y a los vecinos del Valle por el apoyo económico y la colaboración ejemplar, así como la asistencia y ayuda del Gobierno de Navarra.

2. Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea. Grupo de Investigación en Prehistoria IT-1223-19. Centro de Investigación Micaela Portilla, calle Justo Vélez de Elorriaga 1, 01006 Vitoria-Gasteiz y Aranzadi Zientzia Elkartea / Sociedad de Ciencias Aranzadi.

3. Aranzadi Zientzia Elkartea / Sociedad de Ciencias Aranzadi.

4. Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea. Grupo de Investigación en Prehistoria IT-1223-19. Centro de Investigación Micaela Portilla, calle Justo Vélez de Elorriaga 1, 01006 Vitoria-Gasteiz y Aranzadi Zientzia Elkartea / Sociedad de Ciencias Aranzadi.

5. Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea. Grupo de Investigación en Prehistoria IT-1223-19. Centro de Investigación Micaela Portilla, calle Justo Vélez de Elorriaga 1, 01006 Vitoria-Gasteiz.

6. Aranzadi Zientzia Elkartea / Sociedad de Ciencias Aranzadi.

7. Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea. Grupo de Investigación en Prehistoria IT-1223-19. Centro de Investigación Micaela Portilla, calle Justo Vélez de Elorriaga 1, 01006 Vitoria-Gasteiz.

8. Aranzadi Zientzia Elkartea / Sociedad de Ciencias Aranzadi.

9. Aranzadi Zientzia Elkartea / Sociedad de Ciencias Aranzadi.

10. Aranzadi Zientzia Elkartea / Sociedad de Ciencias Aranzadi.

11. Aranzadi Zientzia Elkartea / Sociedad de Ciencias Aranzadi.

12. Servicio de Patrimonio Histórico del Gobierno de Navarra.

13. Servicio de Patrimonio Histórico del Gobierno de Navarra.

14. Universidad del País Vasco / Euskal Herriko Unibertsitatea. Grupo de Investigación en Prehistoria IT-1223-19. Centro de Investigación Micaela Portilla, calle Justo Vélez de Elorriaga 1, 01006 Vitoria-Gasteiz.

15. Aranzadi Zientzia Elkartea / Sociedad de Ciencias Aranzadi.

16. Universidad de Burgos.

17. Aranzadi Zientzia Elkartea / Sociedad de Ciencias Aranzadi.

18. Para una descripción más detallada de la relación de unidades estratigráficas, consultar la Tabla I del anexo.

19. 19. No se han incluido las dos monedas con leyenda ibérica halladas en las inmediaciones del castillo (Aiestaran et al., 2020).

Cómo citar: Aiestaran, M.; Buces, J. et al. (2022): Vida cotidiana, Sociedad y Control Territorial en el Entorno Circumpirenaico Occidental. Arqueología Y Territorio Medieval, 29. e6186. https://doi.org/10.17561/aytm.v29.6576